-Ley divina... de la muerte...-
El famoso “por qué no te callas” en su modalidad más extrema es lo que le haría falta a más de uno, para evitar catástrofes apocalípticas (como poco) al resto de los mortales:
- “La hipertensión se previene con mucho sexo y baile”, José Gomes Temporao dixit. ¿Y quién es este pavo?, os preguntaréis muchos. Bah, pues nadie importante. Solamente el Ministro de Sanidad brasileño, ahí es nada. Vamos, un mindundi indocumentado cualquiera… El caso es que este hombre preconiza que lo mejor es una media de 5 coitos semanales, tengas la edad que tengas, para tener una salud cardiovascular de hierro. Y añade: “no es una broma”. Menos mal que me lo aclaras, machote. Yo pensaba que te estabas quedando con los abuelillos y demás especies protegidas. Pena que voy a tener que reducir mis verbenas erótico-festivas, no vaya a quedarme hipotensa. Y es que 5 (por muy buena rima que tenga) me parecen tan pocos…
- “El pollo que comemos está cargado de hormonas femeninas. Por eso, cuando los hombres comen esos pollos, tienen desviaciones en su ser como hombres”. A ver, querido Evo (Morales, who else), cantemos un poco: Ahora que vamos despacio, ahora que vamos despacio, vamos a contar mentiras, tralará… Aseguras que el pollo del supermercado viene cargadito de hormonas femeninas, tralará. Y que, cuando mi santo come (pongamos) una pechuguita en salsa o unos muslitos a la plancha (que me salen de rechupete, por cierto), ¿se está metamorfoseando en una especie de híbrido entre… Andreíta y los Locomía (no me digas que no parece un grupo de la movida)? ¿Es eso, tralará tralará? Aménjesús, lo que hay que oír por tener alitas…
- “Me he tirado a todas las del pueblo. No gano suficiente para taxis a otras poblaciones, así que no me queda otra que mudarme”. Así, con un par (literalmente). Danny James, oriundo de Lytham Saint Annes, localidad del condado inglés de Lancashire, afirma haberse beneficiado a T-O-D-A-S las mujeres del lugar. Por este motivo, no ve más salida para mantener satisfecha su adicción al sexo que trasladarse a Liverpool, ciudad más poblada y con un mayor abanico de posibilidades “jaraneras”, en la que (seguro) hará las delicias de las más dispuestas y saboreará las mieles del éxtasis y el desenfreno. “Sé que mi historia suena graciosa, pero es un verdadero problema, ya que la cantidad de taxis a los que tuve que recurrir para viajar a localidades cercanas me sumió en la más profunda bancarrota”. Ya, Danny, ya me imagino que tanto látex al por mayor acaba con cualquier economía. Pues suerte, chaval. Y ahí te lanzo mi recomendación del día: ¡mejor fórratela!
- “La denuncié por dejarme insatisfecho. Eso no se hace, hombre. Es criminal.” La que habla es la voz de la desesperación más inhumana. Un panadero de Granada acudió a la Oficina del Consumidor para denunciar a una prostituta que le había dejado, según él, insatisfecho. El cliente, al parecer, abonó a la meretriz la nada despreciable cantidad de 160 euros por un servicio que, a su parecer, debía procurarle a sus carnes los mayores gozos y regocijos que el dinero puede comprar. Sin embargo, la chica no se “trabajó” el jornal lo suficiente y dejó al pobre hombre con carita de “¿capasao?”
Ayyy, Ambrosio, mira que te lo tengo dicho: que se paga al final del servicio contratado, jomío, que eso lo sabe hasta el más “corki”. Ahora, no te esperan más que incomodidades: que si déme el libro de reclamaciones que me voy a explayar a gusto con la tiparraca esta, que si vete a declarar ante el juez ante las risotadas de tus paisanos, que si a ver cómo le explico a mi madre que esa señora no era mi novia formal, sino sólo una pilingui… buff, ¡qué movidón!
Y no sigo que me canso, pero hay muchos más, ¿eh?
1 comentario:
Jajajaja... qué arte, ni Bisbal y su twitter!!
Esa foto no sería "esa foto" sin la niña horrorizada de la izquierda. Para qué queremos photoshop??
Más abrazos!
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