Vamos a ver si nos aclaramos: cuando una tía te pregunta “¿qué tiempo hace?”, tú no puedes responder: “ni fú ni fá, ni frío ni calor, pa mí está bien”. No.
Cuando te pregunto por el tiempo, has de ser claro y conciso: “pues mira, unos 15 grados; si vas por la sombra, ponte la cazadora, que se ha levantado un poco de viento”. Algo así.
Cuando te pregunto por el tiempo, has de ser claro y conciso: “pues mira, unos 15 grados; si vas por la sombra, ponte la cazadora, que se ha levantado un poco de viento”. Algo así.
No es de recibo que me digas que “hace calorcete” y me agarre un resfriado de bigotes por fiarme de tus palabras ambiguas. Que ya llevo varios, por cierto…
¿Por qué demonios a los hombres siempre les parece que hace bueno y yo acabo con estalactitas en la nariz? ¿Es que mi “santo” tiene roto el termostato? ¿Tiene que ir en mangas de camisa en cuanto sale el primer anuncio de “ya es primavera en El Corte Inglés", cuando todas sabemos de sobra que empiezan a emitirlos en lo más crudo del invierno?
Nos vamos a pasar el fin de semana a casa de sus padres y me sale con lo de siempre: “que dice mi madre que hace calor. No les lleves los abrigos a los niños, que te conozco, bacalao”. Y voy yo, como tonta, y le creo.
La niña con sabañones, el crío en urgencias por los mocos y yo con un cabreo monumental, mientras él se arremanga la camisa en un baño de sudor. Es incomprensible. A partir de ahora, a ver si aprendo, llamo yo a mi suegra y organizo las maletas a mi aire, porque estamos en un sin vivir por esta fijación…
Y luego está el tema de “el aire acondicionado-sí, el aire acondicionado-no”. A ver, si uno está en casa (comprobado con termómetro) a unos plácidos 20-21 grados, NO hace falta poner el aire acondicionado. Es la llamada “temperatura ideal”, que se lo he oído yo a la Ministra de Medio Ambiente “cienes y cienes de veces”. Que luego llegan las anginas y las toses y me toca aguantarlas a mí.
Pues tampoco. Hay que estar a 13 grados, porque si no, se le nubla la vista, se le sudan las camisetas y se le derriten los pies. Dime tú si no me ha salido peculiar el chaval… y quisquilloso. Que no veas cómo se pone…
- A ver, que ya me has puesto la calefacción en pleno mes de mayo, ¿no?- me salta sin avisar.
- ¿Yooo??? ¡Pero qué dices! ¡Si tengo apagada la caldera desde marzo!
- ¡Pues alguien nos ha recalentao la casa cosa mala!
- Uy, ese habrá sido el niño, que cuando se pone a echar el aliento, no hay quien le gane- ¡toma! La patata caliente pal chiquillo.
- ¿Cómo va a ser eso?
- O eso, o que la niña está jugando a cocinitas de nuevo y se ha dejado el hornito de la Barbie abierto…
- ¿Me estás tomando el pelo???
- ¿Quién, yooo?
- Sí, me ha sonao a choteo.
- Que no, que no. Pregúntales, ya verás…
- Niñoooooosssssssss- le oigo gritar en lontananza… ya verás qué cachondeo. Le van a dar pal pelo estos dos.
Pues nada. Asunto arreglao. Voy a ponerme una coca-cola bien fresquita, porque, oye, como que noto calor yo también…. ¿será el sofocón por las risotadas interiores que me estoy pegando?
Pues será…
¿Por qué demonios a los hombres siempre les parece que hace bueno y yo acabo con estalactitas en la nariz? ¿Es que mi “santo” tiene roto el termostato? ¿Tiene que ir en mangas de camisa en cuanto sale el primer anuncio de “ya es primavera en El Corte Inglés", cuando todas sabemos de sobra que empiezan a emitirlos en lo más crudo del invierno?
Nos vamos a pasar el fin de semana a casa de sus padres y me sale con lo de siempre: “que dice mi madre que hace calor. No les lleves los abrigos a los niños, que te conozco, bacalao”. Y voy yo, como tonta, y le creo.
La niña con sabañones, el crío en urgencias por los mocos y yo con un cabreo monumental, mientras él se arremanga la camisa en un baño de sudor. Es incomprensible. A partir de ahora, a ver si aprendo, llamo yo a mi suegra y organizo las maletas a mi aire, porque estamos en un sin vivir por esta fijación…
Y luego está el tema de “el aire acondicionado-sí, el aire acondicionado-no”. A ver, si uno está en casa (comprobado con termómetro) a unos plácidos 20-21 grados, NO hace falta poner el aire acondicionado. Es la llamada “temperatura ideal”, que se lo he oído yo a la Ministra de Medio Ambiente “cienes y cienes de veces”. Que luego llegan las anginas y las toses y me toca aguantarlas a mí.
Pues tampoco. Hay que estar a 13 grados, porque si no, se le nubla la vista, se le sudan las camisetas y se le derriten los pies. Dime tú si no me ha salido peculiar el chaval… y quisquilloso. Que no veas cómo se pone…
- A ver, que ya me has puesto la calefacción en pleno mes de mayo, ¿no?- me salta sin avisar.
- ¿Yooo??? ¡Pero qué dices! ¡Si tengo apagada la caldera desde marzo!
- ¡Pues alguien nos ha recalentao la casa cosa mala!
- Uy, ese habrá sido el niño, que cuando se pone a echar el aliento, no hay quien le gane- ¡toma! La patata caliente pal chiquillo.
- ¿Cómo va a ser eso?
- O eso, o que la niña está jugando a cocinitas de nuevo y se ha dejado el hornito de la Barbie abierto…
- ¿Me estás tomando el pelo???
- ¿Quién, yooo?
- Sí, me ha sonao a choteo.
- Que no, que no. Pregúntales, ya verás…
- Niñoooooosssssssss- le oigo gritar en lontananza… ya verás qué cachondeo. Le van a dar pal pelo estos dos.
Pues nada. Asunto arreglao. Voy a ponerme una coca-cola bien fresquita, porque, oye, como que noto calor yo también…. ¿será el sofocón por las risotadas interiores que me estoy pegando?
Pues será…
21 comentarios:
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJJA, en mi caso ambos somos calurosos y tambien nuestras hijas, aunque ahora él está un poco enfermo y al no comer grasa ni beber nada, pues como que se queda helado y me enciende la chimenea en cuanto me descuido, y yo con las ventanas abiertas todo el día, hasta en invierno.
Pero un día, hace unos años, cuando el iba en camisa de manga corta en invierno, llevaba un par de horas en la cama, la cual estaba supercalentita, porque él de noche es como una estufa durmiente, ajajajaja, pues me fúi yo a la cama y le arrime mis pies que estaban como tempanos. Pegó un brinco tremendo y me gritó : "caguentodoloquesemenea, Queli, ponte unos calcetines que tienes los pies helados..." a lo que yo le contesté amorosamente : "pero si los llevo puestos...."
Besucos. Y por cierto, me encanta tu blog y pienso leermelo enterito y poco a poco para disfrutarlo.
Ay madre el frío / calor, el ponme el aire quítame el aire. La de discusiones que he visto y vivido yo por estos temas. Parece mentira que digan los médicos que todos tenemos grado arriba grado abajo la misma temperatura corporal, si hay quien se hiela en el Sahara y quien se derrite en Groenlandia.
Eso sí, desde que vivo en estas paradisíacas islas de perpetua primavera, tengo menos dudas al respecto: HACE CALOR. Siempre. Y punto. Hale, voy a subir dos grados el aire.
Yo a mi galán siempre le digo que debe estar en plena menopausia porque esos calores no son normales... ¡y para colmo el aire acondicionado de nuestro Ibiza del 96 ha muerto y el muchacho me abre la ventanilla en plena autopista! Sin comentarios... Jajaja
Hija mía, deben ser todos los maridos iguales, porque al mío no hay quien le entienda. En pleno invierno es capaz de ir en manga corta. Y sin embargo en verano, es capaz de dormir tapado hasta con edredón.
ja ja ja que risa me ha dado!!!!
Huy si hay historias de esas!!!!
El informe del estado del tiempo no se lo pidas mas, ja ja ja
Besos!
Yo creo que sí, que los hombres tienen el termostato fundido. Mi marido no es especialmente caluroso pero es de los que, como el tuyo, en cuanto ve un rayo de sol sale a la calle despelotado. Y, claro, luego vienen los resfriados. Además es peor que un niño, cuanto más le digo que se abrigue, peor.
Luego, sin embargo, en pleno verano es capaz de no dejarme poner el aire, porque dice que pasa frío.
En fin, no sé, son raros, qué le vamos a hacer.
A ver! es que no aprendes,siempre has lo contrario de lo que te dicen. Si te dicen hace calor, quiere decir lleváte una chaqueta. Si te dicen hace frío ponte una camiseta. No vés que ellos sólo quieren llevarnos la contraria?
Un beso y ahora creo que tengo más tiempo para ponerme al día con los blogs que tenía olvidado por el bendito exámen de inglés.ç
besitos
DIOS JAJAJAJAJAJAJAJAJA, oye, tienes un modo de escrivir muy divertido, de veras que me ha encantado.
Uuuh, mi madre es mas rara con esto del tiempo... Tan pronto me ruge por subir a trabajar con pantalones largos porque hace calor como me crucifica cuando quiero salir de noche con una camisa de tirantes porque hace frío. No hay quien la entienda :P
Pero, ¿es que todos los tíos son iguales? El resto del mundo mundial helados de frío, y ellos, en manga corta. Pero, joé, todos.
No te imaginas el frío que pasan las criaturas en la oficina porque al único machote campeón que hay allí, enciende el aire acondicionado en cuanto llega. Y claro, como es el primero en llegar, cualquiera le rechista...
Ofú, historias como éstas, para dar y vender. Sí, y para regalar tb.
Lo que pasa es que siempre, siempre, son ellos los que te dicen:-"Joder, las mujeres es que tenéis el termostato roto"-. Y tú piensas:-"Como te dé un mamporro con el termostato se te va a acabar la tontería, hombrecoñoya!!!"-.
:)
Besosssss!!!!
Es por eso que yo vivo sin hombre, jajajaj, por el tema grados de temperatura, y si, va con segundas, con primeras y terceras, jajaaj. Pues eso, que yo, toda la cama para mi, toda la calefaccion para mi y punto.
Besos, feliz finde.
hola!!
jejeje!!me reido con tu explicación pq yo siempre estoy en desacuerdo con mi chico ya que yo siempre tengo frío y él siempre: -FRIO????!!si se esta muy bien NO HACE FRIO!
y yo siempre:
-Que si hace frío o no,no depende solo de tus sensaciones térmicas!!que las mías también cuentan!!déjame tener frío en paz no sintiendome una loca!!jeje!!
Ayy, qué bueno, pues en mi caso la del termostato roto soy yo, en el trabajo están todos asados y yo con un frío horrible; el caso que al revés también me pasa....pero yo tengo excusa, que conste, tengo el tiroides mal y la medicación debe hacer estragos al climatizador personal...
Por cierto, me hago seguidora, que desde me descubrió el novio tu blog no hago mas que de reirme y que de reirme... jejeje...
:D :D
Me ha hecho mucha gracia y me he sentido MUY identificada con tu situación ¡menuda cruz tener un caluroso así al lado...! :) ¿Con la manta, edredón, sábanas...? En general con la ropa de cama y lo de taparse o no taparse no discutís? Si es así, echa un ojo a esto: http://www.pinkermoda.com/noticia/sabana-termorreguladora/48068
¡besos!
Muchas gracias a todos por vuestros sabios consejos (lo de la sábana termo-reguladora es como para pensárselo) y por vuestra empatía!!!
Ya veo que somos muchAs en este vía crucis del "termostato-roto"...
¡Un abrazo colectivo!
Te comprendo tanto!
Obi-Wan es Canadiense y en pleno mes de enero va en mangas de camisa por el jardín!; la casa de progenitor A es más fría que el planeta de Hoth y cuando vamos siempre nos dice que ha subido la calefacción (sé que lo hace por mi) pero aún así voy con TRES pares de calcetines y acabo con sabañones... y los dos tan tranquilos en MANGAS DE CAMISA.
Lo dicho, cúanto te entiendo!.
Yo por si acaso, cuando me preguntan digo el tiempo, la temperatura, la humedad, radiación UV, dirección y velocidad del viento y presión atmosférica. Y solo mirando un poco por la ventana xD.
Jajajajajaja ¡Madre mía! ¡Qué "santo" varón! xD Estará el hombre con la menopausia con esos sofocos jejejeje
JAjaajaajjaajja!! Es verdad, ellos SIEMPRE tienen calor. No conozco a un tío que sea friolero... Ni que sea del norte, ni que sea del sur. Siempre tienen calor. Tú helá de frío, que te castañetean los dientes y él sudando, y con ojos de plato te dice:tienes frío???????? Pero si hace un calorrrrrrrrrr... buffff
Y luego llegan las discusiones por la temperatura del aparato de aire acondicionado. Unidas a las discusinens por el mando de la tele... en fin. Pues no hay divorcios por incompatibilidad de temperaturas????
Besos!
Ventajas de no tener Santo....¡¡¡ Yo me lo guiso y yo me lo como....ja,ja,ja
jajajajaja a mi eso también me pasa, soy demasiado caluroso. Para mi cuando hace fresquito los demás van ya con abrigo.
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