Tenemos un gaitero dando por saco todos los días frente al portal. Le ha debido quitar el puesto al del acordeón, que llevaba en ese mismo sitio los últimos 18 meses. A lo mejor es su primo y le ha cedido el puesto mientras el otro está de vacaciones, para que nadie se lo quite, yo qué sé…
El caso es que el hombrecillo se ha apostado bajo nuestra ventana y echa el día soplando incansablemente, desde las 9 de la mañana hasta, mínimo, las 9 de la noche, que es cuando recoge sus bártulos, se echa las monedas al bolsillo y vuelve a su casa a dar la murga a su parienta, supongo…
Mira, ahora mismo son las diez menos cuarto de la noche y todavía me parece oírle. Como hoy no ha llovido, ha decidido hacer horas extras, que está la calle muy animada… Es infatigable. Es que encima no da tregua ni un minuto. ¡No va ni a hacer pis, ni a beber agua, ni a comer, ni a nada! Ni siquiera deja pasar unos segundos entre canción y canción, lo interpreta todo seguidito y es imposible diferenciar una de otra. ¡Qué letanía! Es un sonido cargante, hiriente, monótono y lacerante, que te araña el tímpano como el maullido de un gato en celo.
Como es de suponer, al hombre le ha llovido ya de todo: huevos, agua, tomates… pero él ni palidece. Como si la cosa no fuera con él. Sigue inflando y desinflando sus carrillos al ritmo frenético que imponen sus dedos sobre la gaita. Me entran ganas de agarrar todas las guías de Escocia que tengo por casa y tirárselas a la cabeza, a ver si lo pilla y se va de viaje a ver a sus ancestros. Como no soy violenta, no lo hago. Pero ojalá la del tercero, que tiene muy mala leche, escuche mis plegarias y se le ocurra hacer lo mismo para evitarme el papelón.
Y mira que a mí me encanta la música, ¿eh?. Pero en su justa medida. Si, al menos, el gaitero parara a hacer sus necesidades, variara de repertorio o versionara alguna cancioncilla conocida, pues ni tan mal… pero qué va, lo que toca no suena ni a música, es sólo ruido callejero perpetrado sin ninguna destreza. Pa mí que está aprendiendo, porque las notas suben y bajan descoordinadas y sin ninguna armonía. Es que acuesto a los niños y me llaman a gritos desde su cuarto para decirme “mami, dile a ese señor que pare, que no me puedo dormir y me van a entrar pesadillas”. Cuando hasta los niños se dan cuenta, es que algo estás haciendo mal, ¿no?
Estoy por bajar a la calle y, disimuladamente, pincharle el fuelle con una agujita, para que tenga que llevar su instrumento a reparar y podamos ver la tele a volumen normal un par de días. ¡Qué fijación le ha entrado con mi barrio! ¿Es que no hay más calles en esta ciudad, que siempre me tiene que tocar a mí aguantar el folklore popular, con la de gente que estará deseando que le den la serenata bajo su ventana?
Sé que es peor que te toque delante una obra del Ayuntamiento. Pero es que las obras, aunque parezcan eternas, siempre tienen fecha de caducidad. ¡Este tío no!. Voy a llamar a la SGAE para que tome cartas en el asunto. A ver la cara que se le queda al gaitero cuando le digan que “son 50.00 euros, chaval, y como sigas, te lo duplicamos”.
El caso es que el hombrecillo se ha apostado bajo nuestra ventana y echa el día soplando incansablemente, desde las 9 de la mañana hasta, mínimo, las 9 de la noche, que es cuando recoge sus bártulos, se echa las monedas al bolsillo y vuelve a su casa a dar la murga a su parienta, supongo…
Mira, ahora mismo son las diez menos cuarto de la noche y todavía me parece oírle. Como hoy no ha llovido, ha decidido hacer horas extras, que está la calle muy animada… Es infatigable. Es que encima no da tregua ni un minuto. ¡No va ni a hacer pis, ni a beber agua, ni a comer, ni a nada! Ni siquiera deja pasar unos segundos entre canción y canción, lo interpreta todo seguidito y es imposible diferenciar una de otra. ¡Qué letanía! Es un sonido cargante, hiriente, monótono y lacerante, que te araña el tímpano como el maullido de un gato en celo.
Como es de suponer, al hombre le ha llovido ya de todo: huevos, agua, tomates… pero él ni palidece. Como si la cosa no fuera con él. Sigue inflando y desinflando sus carrillos al ritmo frenético que imponen sus dedos sobre la gaita. Me entran ganas de agarrar todas las guías de Escocia que tengo por casa y tirárselas a la cabeza, a ver si lo pilla y se va de viaje a ver a sus ancestros. Como no soy violenta, no lo hago. Pero ojalá la del tercero, que tiene muy mala leche, escuche mis plegarias y se le ocurra hacer lo mismo para evitarme el papelón.
Y mira que a mí me encanta la música, ¿eh?. Pero en su justa medida. Si, al menos, el gaitero parara a hacer sus necesidades, variara de repertorio o versionara alguna cancioncilla conocida, pues ni tan mal… pero qué va, lo que toca no suena ni a música, es sólo ruido callejero perpetrado sin ninguna destreza. Pa mí que está aprendiendo, porque las notas suben y bajan descoordinadas y sin ninguna armonía. Es que acuesto a los niños y me llaman a gritos desde su cuarto para decirme “mami, dile a ese señor que pare, que no me puedo dormir y me van a entrar pesadillas”. Cuando hasta los niños se dan cuenta, es que algo estás haciendo mal, ¿no?
Estoy por bajar a la calle y, disimuladamente, pincharle el fuelle con una agujita, para que tenga que llevar su instrumento a reparar y podamos ver la tele a volumen normal un par de días. ¡Qué fijación le ha entrado con mi barrio! ¿Es que no hay más calles en esta ciudad, que siempre me tiene que tocar a mí aguantar el folklore popular, con la de gente que estará deseando que le den la serenata bajo su ventana?
Sé que es peor que te toque delante una obra del Ayuntamiento. Pero es que las obras, aunque parezcan eternas, siempre tienen fecha de caducidad. ¡Este tío no!. Voy a llamar a la SGAE para que tome cartas en el asunto. A ver la cara que se le queda al gaitero cuando le digan que “son 50.00 euros, chaval, y como sigas, te lo duplicamos”.
21 comentarios:
Y en estos casos no se puede llamar a la policía? Vamos digo yo que si a un vecino se le puede denuncir por ruido este caso será pareceido, llama a ver que te dicen. Seguro que ha llegao a tu casa porque le echaron del último sitio en el que deleitaba los oidos con su refinada música!
Jajaja yo creo que si llamas a la SGAE .. es la mejor solución, porque esos con tal de sacar pelas, son capaces de quitarle la gaita y las faldas al gaitero, oye... y si ya se queda en bolas..pues si no es gran cosa el asunto... llamas a la poli que lo detenga por exhibicionismo.
Besossssssssssssssssssssssss
jo!
no se muy bien como llegué aquí (probablemente un click llevó a otro click y así) pero estoy pasando muy bien leyendo tu blog! (ahora me voy a explorar las primeras entrdas, jejeje)
eso
XDDDDDD
La mejor solución pasa por la SGAE. A la hora de recaudar son voraces y al gaitero o , su intento, se le iban a quitar las ganas de seguir soplando.
un saludo
jajajaja,hay que ver como eres....
Lo de la SGAE parece ser la solución mas ppular...ahora,q si no funciona te propongo un trueque...te cambio el gaitero por el de la trompeta y el piano "hacemusicas" ( término de mi hijo ) que se ha plantao hace año y medio en el bar debajo de casa...estoy un poquito ya hasta la mismisima con la trompetita de los coj...
Se que no eres violenta,yo tampoco...pero me temo que dentro de unos dias cambiaras de opinion en relacion a cuando hay que cambiar de pedir las cosas por favor,lanzar indirectas y pasar directamente a la agresion personal....yo estoy en la fase de " o te piras a otro barrio majete o te descalabro de una pedrada ".
Pobre gaitero y pobre gaita...a donde va ir a tocar si le denuncias...
Bello e interesante relato cargado de sano humor.
Un placer leerte y pasar por tu blog.
No sé si es solución, pero yo llamaría a la policía. Me parece fatal que esté molestando de esa forma a la gente, para mi sería un problemón porque mi hijo necesita bastante silencio para dormir así que o le desaloja la poli o lo hago yo xDDD Además, no creo que sea legal estar en la calle recogiendo moneditas, no?.
Pues mira...por lo menos, por una vez (y supongo que sin que sirviera de precedente), la SGAE haría un bien a la sociedad. Así que, adelante, adelante ¡llámalos! ^^
Te cuento una aventurita de mi abuela ( imaginate se murio hace 31 años, con 82, asi que echa cuentas...) San Fermin, bajo su balcon un par de mozos ( de los de antes, borrachos pero respetuosos) deleitando al edificio con sus lindas y alcoholizadas voces....
Mi abuela, con la mala leche que le caracterizaba ( siempre han dicho que somo igualitas..) harta ya, agarra un cuenco enorme y lleno de agua se lo tira encima... ( NO era nadie mi abuela..)
Por fin se hace el silencio, hasta que un rato despues, vuelven los gloriosos canticos al Santo, miran por la ventana y eran los mismos mozos con UN PARAGÜAS.........¡¡¡¡¡
La noche, se la dieron, pero hay que reconocer que tuvieron su gracia los muchachos....¡¡¡¡
Mejor no pensar la cara de mala leche que se le debio quedar a mi abuela y la de risa floja de mi abuelo ( por aquello de la envidia malsana de tener que estar él en casa...) ja,ja,ja
Y si contratais a algún otro músico osease, alguien que conozcais que os haga el favor y se ponga al lado de él a tocar otro instrumento hasta echar al otro de alli? Aunque hay que contemplar la opción que el que es contratado, le coja gustillo a tocar en la calle y luego tengais que mandar ya en este caso a un matón para echar al segundo, no se.
Me quedo con lo de la SGAE ;)
Como te entiendooooo!!!!!! yo no tengo un gaitero bajo la ventana... pero piensa que en tu caso, el día que se canse se irá o cambiará de esquina.... En mi caso, mi vecino de abajo es músico, uno de esos de las bandas de "música de fondo" de los programas de tv, con lo que llevamos 10 años, oyendo una y otra vez la misma canción cuando ensaya, ah! él toca el saxo! Te parece una putada???? si???? que dirías si añado a la historia que... qué hacen los hijos de un músico??? pues por lo visto, cuando el padre no ensaya, desde hace 2 años la niña da clases de violín, piano y canto!!! y canta como si apalearan un gato!!!!
mal de muchos..... putea igual!!!!!!!
¡¡¡Oyoyoyoyyyy qué ideas más insólitas me estáis dandooo!!!!
Mamalis y Una mamá contra corriente: lo de la policía me da yuyu.... es que el pobre tiene cara de bueno... ¿cómo voy a llamar yo a la poli, si no lo he hecho en mi vida! No me atrevo... Soy una cobarde, lo reconozco...
Mo, Kobal y Martha: ya veo que sois de los míos... a recurrir a la SGAE para que hagan una cosa últil por una vez en su vida, ¿eh? Yo pienso igual...
Lady Ryoko: Bienvenida a este, mi humilde blog. Pásate, quédate, comenta lo que quieras o tómate algo, que invita la casa! Gracias por tu comentario.
Odalis y Lana: entre la trompeta de la una y el saxo de la otra, veo que estáis casi peor que yo!! Ánimo, que me habéis dado un subidón al comprobar que ni soy la única sufridora ni la que peor parte se lleva. Resignación, hermanas...
El ave peregrina: sí, pobre hombre, yo pensaba igual.... al principio.... pero te aseguro que al tercer día cambié de opinión... gracias por pasarte!
Eli: Pues lo del paraguas sería la pera, porque ver a un gaitero sujetando un paraguas con.... los pies???... sería de foto!
Sí es lo que parece: sería la repanocha!! Otro músico para que le haga los coros!!! jajaja Y después, a contratar a los Miami para que les partan las piernas a ambos, me comentas, ¿no? Creo que me voy a tener que quedar con los taponcillos de silicona unos meses y a ver en qué queda la cosa... suerte que estos días está lloviendo y el gaitero pliega antes... debo ser la única de este país rogando por que no llegue el verano!!!
Un abrazo para todos y, como siempre os digo: mil gracias por contestar, por compartir vuestra opinión y, sobre todo, por dedicar parte de vuestro tiempo a que el blog siga creciendo.
Sois unos soles!!!
Bueno, también puedes bajar y preguntarle sí es ruso; pues allí, más concreta mente los estudiantes de música suelen bajar a la calle a practicar (y si de paso les cae algo...).
O lo de la SGAE pero... me parece demasiado cruel, la verdad.
Leia Organa: si es que a mí se me va la fuerza por la boca... ni SGAE, ni policía, ni ná.... ¿a que acabo bajando con un bocata-salchichón porque veo que se le está quedando mala cara al chavalillo? Ya verás, ya...
Hmmmm y no sé si será ruso.... con esa faldita, da el pego-escocés totalmente!!!
Saludos!!!
Uyyyyyyyy!!! Me has tocado el punto débil.... y me toca enfadarme.... ;)
Como asturiana que soy, que es eso de que ¿es un sonido cargante, hiriente, monótono y lacerante, que te araña el tímpano como el maullido de un gato en celo?
Entiendo que durante 5 horas, puede serlo....
En Madrid suele haber un gaitero en la Calle Arenal y yo que soy de Asturias no veas lo que me emociona oirlo (un ratito eso si)...
Bueno que te entiendo, pero no seas tan cruel con el pobre hombre, que igual es hasta mi paisano y ya se sabe... ¡¡¡la tierra es la tierra!!!
A ver yo voto también por la SGAE,pero seguro que no irán,porque pensarán que no le podrán quitar un duro al gaitero,pero colarse en las fiestas, en los matrimonios eso sí,porque ya que están de paso comen gratis.
un besito y tírale una moneda y dile te doi más si te quedas calladito.
A ver, Agatha, que no es Hevia tocando una melodía maravillosa... que el tío este perpetra unas disonancias que te dejan sorda, créeme, que la primera aficionada a la música es la menda-lerenda... pero que sea mínimamente decente, no estos acordes roñosos que se saca el hombre de la gaita!!! (joé, cómo ha sonado eso, peor que la propia gaita... juajuajua)
Yo: no, le diré más bien... "te doy un euro pa la SGAE, que deben estar al caer"... a ver si le acojono y se lo pìensa...
Gracias por venir!!!
Échale un cubo de agua helada, verás cómo se calla.
Uff, vaya rollo, me parece a mí que poco se puede hacer, si está en la calle y deja de tocar antes de la noche...
Ánimo! y si no, siempre te quedan los tapones para los oídos ;)
Esa es una de las típicas cosas de las que la gente que no vivimos con nadie de ese tipo que nos aceche no nos damos cuenta, pero vaya tostón... esperemos que se desgallite pronto y te deje vivir.
Un besico.
"Lady Ryoko: Bienvenida a este, mi humilde blog. Pásate, quédate, comenta lo que quieras o tómate algo, que invita la casa! Gracias por tu comentario".
eee!
se agradece, me tomaré una cervecita mientras miro q sucedió con la vaca acosada y el trans ¿escayolado?
alucino con esas noticias!!!!!!
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