¡En qué lío me he metido!
Me dice la niña que les han mandado en el cole unas manualidades para hacer en casa y que necesitan la ayuda de los papás para que salgan bien. Yo, armada de toda mi paciencia, he agarrado la lista y me he propuesto hacer el mejor sistema solar que haya pisado ese colegio, que para eso sacaba sobresaliente en Ciencias Naturales y me sé los planetas al dedillo, gracias a las canciones de Enrique y Ana.
Todo parecía fácil y asequible, así que le dije a mi “santo” que no nos hacían falta sus manitas para nada. Que las chicas nos bastábamos solas. Error.
Acudo a la tienda de manualidades que hay en el centro y ya empieza mi mosqueo. Resulta que las pelotitas de porexpán, imprescindibles para hacer los planetas, están agotadas. ¡Malditos padres cabrones, que se me han adelantado para que mi hija pase vergüenza con pelotillas hechas a base de papel higiénico cubierto con esparadrapo! Ni hablar. Me voy a un sitio de venta al por mayor que conozco y fijo que tienen.
Efectivamente. Tenían. El diámetro de cada bolita es diez veces superior al que pedían en el cole, pero eso da igual. Mi hija va a tener un sistema solar a escala 1:1 y no se hable más. Lo malo es que los planetas han de “colgar” de un aro de un metro de diámetro y, si seguimos con las proporciones, el nuestro tendrá que tener 10 metros. Pues nada. ¡Lo que haga falta!. A ver dónde encuentro cartón-pluma suficiente para semejante ruedo. Tengo claro que no me va a caber en el coche, pero ya me las apañaré para transportarlo al colegio. ¿No consiguió la mamá de Anita meter en su 4x4 un chalet de cartón de tres alturas, que parecía el de Ronaldo, cuando nos habían insistido en que no midiera más de 30 centímetros? Pues mi hija no va a ser menos.
Como estáis empezando a comprender, las competiciones entre padres están a la orden del día en el colegio de mis hijos. Con las manualidades se ve lo peor de cada progenitor. Recuerdo el día que el padre de Laurita (instigador de esta guerra sin sentido) se presentó, el muy sinvergüenza, con una pecera de cristal de 2x2x4 metros, de agua climatizada a 20 grados perennes y pececitos de diseño, traídos expresamente del Amazonas (o parecido, porque yo no los había visto en mi vida y mira que estoy viajada). Los demás nos quedamos de una pieza, porque llevábamos botes de mermelada con la tapa agujereada o cajas de metacrilato (que ya me costó encontrar una, no os vayáis a creer que es tan fácil) llenas de animalitos y algas de plástico. Ahí, empezó una batalla sin cuartel que todavía perdura. Y que sólo puede ir a peor.
Como cuando Luisito acampó durante tres días (con sus noches) en las puertas del colegio, porque tenía que ser el primero en presentar su robot autómata y autónomo, que comía y hacía sus necesidades sin que nadie le tuviera que acompañar al baño. Claro, como su padre es Ingeniero de Telecomunicaciones, se las sabe todas en lo que a cableados y chips se refiere. Y yo, que soy de Letras, con una Nancy forrada de albal y mi hija, haciendo el ventrílocuo a lo José Luis Moreno, con frases ensayadas tipo: “Hola, mí llamarme Robot XP3, venir de lejano planeta interestelar, querer ser tu amigo”. Manda cojones… Qué bochorno pasó la pobre cría y qué risotadas se echaba el padre de Luisito, que será todo lo Ingeniero que tú quieras, pero también un cabrón con pintas.
En fin, que me he puesto a colorear los planetas con las témperas y no tenía litros suficientes para el diámetro de tanta bola. Sal a comprar más pintura, coge también unos aros para Saturno, una bombilla que haga de Sol y unas circunferencias oscuras. ¿Para qué?, os preguntaréis.
Pues para los agujeros negros, que mi hija esta vez se lleva el sobresaliente como está mandado. Ya verás qué bonito cuando salga al rellano… bueno, mejor al portal, que en el ascensor tampoco me entra, a montar todos los planetas, con sus satélites, sus anillos y sus agujeros negros… va a ser la envidia de todo el colegio. A ver dónde lo ponen. Fijo que lo montan en el salón de actos, porque lo que es en el aula, lo veo difícil.
A ver si el padre de Luisito me vuelve a soltar lo de “chapucera”, que le pego un mandoble que se le va a olvidar toda la carrera de Teleco del golpe.
Me dice la niña que les han mandado en el cole unas manualidades para hacer en casa y que necesitan la ayuda de los papás para que salgan bien. Yo, armada de toda mi paciencia, he agarrado la lista y me he propuesto hacer el mejor sistema solar que haya pisado ese colegio, que para eso sacaba sobresaliente en Ciencias Naturales y me sé los planetas al dedillo, gracias a las canciones de Enrique y Ana.
Todo parecía fácil y asequible, así que le dije a mi “santo” que no nos hacían falta sus manitas para nada. Que las chicas nos bastábamos solas. Error.
Acudo a la tienda de manualidades que hay en el centro y ya empieza mi mosqueo. Resulta que las pelotitas de porexpán, imprescindibles para hacer los planetas, están agotadas. ¡Malditos padres cabrones, que se me han adelantado para que mi hija pase vergüenza con pelotillas hechas a base de papel higiénico cubierto con esparadrapo! Ni hablar. Me voy a un sitio de venta al por mayor que conozco y fijo que tienen.
Efectivamente. Tenían. El diámetro de cada bolita es diez veces superior al que pedían en el cole, pero eso da igual. Mi hija va a tener un sistema solar a escala 1:1 y no se hable más. Lo malo es que los planetas han de “colgar” de un aro de un metro de diámetro y, si seguimos con las proporciones, el nuestro tendrá que tener 10 metros. Pues nada. ¡Lo que haga falta!. A ver dónde encuentro cartón-pluma suficiente para semejante ruedo. Tengo claro que no me va a caber en el coche, pero ya me las apañaré para transportarlo al colegio. ¿No consiguió la mamá de Anita meter en su 4x4 un chalet de cartón de tres alturas, que parecía el de Ronaldo, cuando nos habían insistido en que no midiera más de 30 centímetros? Pues mi hija no va a ser menos.
Como estáis empezando a comprender, las competiciones entre padres están a la orden del día en el colegio de mis hijos. Con las manualidades se ve lo peor de cada progenitor. Recuerdo el día que el padre de Laurita (instigador de esta guerra sin sentido) se presentó, el muy sinvergüenza, con una pecera de cristal de 2x2x4 metros, de agua climatizada a 20 grados perennes y pececitos de diseño, traídos expresamente del Amazonas (o parecido, porque yo no los había visto en mi vida y mira que estoy viajada). Los demás nos quedamos de una pieza, porque llevábamos botes de mermelada con la tapa agujereada o cajas de metacrilato (que ya me costó encontrar una, no os vayáis a creer que es tan fácil) llenas de animalitos y algas de plástico. Ahí, empezó una batalla sin cuartel que todavía perdura. Y que sólo puede ir a peor.
Como cuando Luisito acampó durante tres días (con sus noches) en las puertas del colegio, porque tenía que ser el primero en presentar su robot autómata y autónomo, que comía y hacía sus necesidades sin que nadie le tuviera que acompañar al baño. Claro, como su padre es Ingeniero de Telecomunicaciones, se las sabe todas en lo que a cableados y chips se refiere. Y yo, que soy de Letras, con una Nancy forrada de albal y mi hija, haciendo el ventrílocuo a lo José Luis Moreno, con frases ensayadas tipo: “Hola, mí llamarme Robot XP3, venir de lejano planeta interestelar, querer ser tu amigo”. Manda cojones… Qué bochorno pasó la pobre cría y qué risotadas se echaba el padre de Luisito, que será todo lo Ingeniero que tú quieras, pero también un cabrón con pintas.
En fin, que me he puesto a colorear los planetas con las témperas y no tenía litros suficientes para el diámetro de tanta bola. Sal a comprar más pintura, coge también unos aros para Saturno, una bombilla que haga de Sol y unas circunferencias oscuras. ¿Para qué?, os preguntaréis.
Pues para los agujeros negros, que mi hija esta vez se lleva el sobresaliente como está mandado. Ya verás qué bonito cuando salga al rellano… bueno, mejor al portal, que en el ascensor tampoco me entra, a montar todos los planetas, con sus satélites, sus anillos y sus agujeros negros… va a ser la envidia de todo el colegio. A ver dónde lo ponen. Fijo que lo montan en el salón de actos, porque lo que es en el aula, lo veo difícil.
A ver si el padre de Luisito me vuelve a soltar lo de “chapucera”, que le pego un mandoble que se le va a olvidar toda la carrera de Teleco del golpe.
23 comentarios:
jajajajajaja...que edad tiene la niña que ya tiene que hacer esos trabajos???...
el mio en 6to de primaria tenia que hacer un circuito electrico....cagate tu de tus problemas con el diametro de los planetas....primero yo de electricista no tengo na de ná...y mi hijo de " vocacion" cero...así que nos fuimos a un sitio donde se " suponia" los vendian ya montados...
al cole que llegamos todos emocionados con el circuito divinodelamuerte...y para cuando voy a recogerle a la salida,sale el pobre con la cara llena de churretones de haberse pegao la llorera del siglo " mamá,q dice la señorita que no se puede mentir,y que no vale que sea una pieza de las teles "..
Como no tenia ni idea del aspecto de un circuito,eché una ojeada a lo q tenían de genero y le dije al vendedor " quiero esa cosa".
jaja. muy bueno tu relato, espero que la madre, digo la niña saque el sobresaliente. Ya nos contarás.
un saludo
jojo, que bueno empezar con unas carcajadas la mañana, genial la historia (y genial tu gramática, me encanta como escribes). Por cierto, que habeis hecho con Plutón? Le habeis dado de lado haciendole vacío, por enano y tímido??
Pues miedo me dan estas cosas porque yo no pienso entrar en esas guerras. Sinceramente, creo que los profesores deberían valorar esos trabajos hechos única y exclusivamente por los padres con un cero, para que la próxima vez aprendan que se trata de ayudar a sus hijos, no de competir con otros padres. ¡Qué asco de sociedad y qué mal, qué mal lo voy a llevar!.
Ja,ja,ja... yo hasta ahora me salvo y mas me vale, porque no hago una linea recta ni con regla....¡¡¡
Para eso, es mas apañada Claudia, que siempre me dice, mami tranquila que de esto me ocupo yo...¡¡ Creo que no confia nada en mis cualidades artisticas....ja,ja,ja
Pues vaya... te veo pidiéndole a la profesora que los niños hagan un blog... ahí ni el papa de Juanito ni la mamá de Inesita.... tu arrasas!. jeje.
jajjajaja, muy bueno! ya nos contarás que pasó en el cole al montarlo!!! y la cara del papá incitador!!
Un besito! que quedo dando una vuelta pot tu blog!!!!!
Esthertxu, menuda faena. Solo te digo que a ver si nos pones una foto cuando esté acabado. ¡Has despertado mucha expectación!
Un abrazo
-Odalis, el sistema solar es de lo primerito que les mandan hacer. Lo del robot fue algo "casero", no tenía que ser el mismísimo C3PO. Salvo el del padre de Luisito, que no sabe leer las instrucciones y se lo toma todo a la tremenda.
-Yo: le han puesto una A, que viene a ser el equivalente a nuestro sobresaliente de entonces. Aunque me da que les han puesto a todos lo mismito...
-Alber: Plutón estaba presente. ¡Faltaría más! Yo soy de la vieja escuela y no hago de menos a nadie, ¡¡¡aunque sea chiquitín!!! jajaja
-Una mamá (contra) corriente: a ver, que a mí no es que me haga especial ilusión pintar a Mercurio o rodear a Saturno de anillitos, pero chica, nos piden que ayudemos a los niños, supongo, para que nos impliquemos con ellos en lo que están aprendiendo. Ahora bien, hacerle todo el trabajo a la criatura, como que no... ahí te doy toda la razón.
-Eli: mi hija también es muy mañosa. En breve me veo dejándola a ella sola, porque cuando empecemos con los cableados va a ser de risa. Si no sé ni desenrollar la madeja!!... por cierto.... ¿se llama "madeja" la bola esa de cables que se forma invariablemente bajo la tele o detrás de la mesa del ordenata?? Qué cosas...
-Leia: hmmmm... buena idea esa del blog.... estoy por proponerlo en la próxima reunión de padres... juajuajua
-Lana: al final, abultaba menos de lo que me temía y lo pude llevar en brazos al colegio. ¡¡Gracias a que vivo sólo a 5 minutillos!!!
-Hera: A ver si mi "santo" se tira el moco y pasa las fotos al ordenata. Aunque no sé si al final consiguió meter todos los planetas en la misma foto...
Un abrazo para todos!!!
¡¡Qué malos somos los profes a veces!!, también es cierto que cuando se manda algo así, siempre están las típicas madres que te traen algo fabuloso y luego otras que te traen una auténtica MIERDAAA, ahí se ve lo que se implica cada uno en sus hijos. Yo te daría un 10
Jajajajajaja! Menudo follón! No sabía yo que en los coles se daban este tipo de rivalidades!
Fu! No tuve suficiente con ir al cole a competir cuando era cria, que voy a tener que volver a hacerlo cuando tenga hijos??? ¿Por qué?? Jooooooo...
Jajajaja...qué bueno, eres la pera!!
Y yo que me quejaba pq me hacían hacer collares con macarrones...
Besirrinines
yo alucino... pero como se hacen esas cosas en los colegios? los niños tienen que aprender a trabajar solos, asi solo aprenden a aumentar su competitividad hasta niveles altisimos, y la de sus padres...
en fin, espero que os salga muy bien el trabajito, que la pobre niña no tiene culpa de que haya gente que disfrute haciendose ver superior a los demas, como el tal luisito.
digo, el padre de luisito (sorry) @_@
en mi cole no se hacian estas cosas!! ^^u
Ni en el mío, Cantnoy, ni en el mío...
Yo quiero que vuelvan los collares de macarrones!!! Con lo vistosos que quedan y lo baratos que son.... y fáciles, se hacen sin ayuda paterna!!!
Chica que me has enviado a casa directamente en un viaje ínter-memorial, anda que no sufrió mi madre desde la escuela elemental hasta el final de mi carrera (que no te creas que eso disminuye con la edad), me ayudo a hacer desde el típico trabajo de replica de la célula, si también con bolas de porexpan, hasta una maqueta de una articulación sinovial que tantos dolores de cabeza me dio a mitad de la carrera.
Esta es la hora en que mi madre dice que ademas, de su carrera puede presentar un examen de las mías, o de las de mis hermanos, la de exposiciones que le hice solo a ella, y cuantas veces le re-decore los muros de casa con mis apuntes (que los míos eran mejor a escala y con dibujo).
Yo no digo nada, te preparo para lo que viene... la sed de poder!! que un pavo real le queda pequeño a una madre orgullosa de su hija.
jajajajajajajajajajajajajajajajaja
10 metros de diametro!
jajajajajajajajajajaja!
Muy bueno, Esthertxu....me has alegrado la tarde!!!!
Un abrazo!
Maaaaaadre mía qué estrésssssss....
Está claro, que algunos padres son peores y más infantiles que los hijos. Lo digo por el "teleco"...
Poco tendrá que hacer, para entretenerse con estas cosas tannnnnnnnnnnnto..
Bah..! Seguro que tu sistema solar es el mejor de la clase, yo ya te doy un 10!
Un beso
jajajajajajajajaj! me duele la barriga de las risa! Muy pero que muy bueno, lo que no se si el teleco le pondrá movimiento que te veo con manivelas gigantes.
al menos tu hija sabia lo que queria y necesitaba..te ruego mires esto..yo me rei muchisimo en su dia...
http://www.youtube.com/watch?v=jmzm5-glj3E
jajaj dioooooos que fuerte me recuerda un montón a cuando yo hacia esas cosas (bueno mi madre y si eso yo xD) teniamos q hacer un robot con cosas reciclables qué me quedó estupendísimo! se llamaba robotina xD un beso
Jojojojojo, muy bueno. A mi siempre se me diero relativamente bien las manualidades, pero mis padres si me ayudaban de vez en cuando, sobre todo cuando había que hacer un trabajo fino porque yo era un poco albañil, jajaja
Anda que no hay jaleo entre padres con los partidos de futbol de sus hijos, madredelamorhermoso, yo es que les prohibiría la asistencia, jajaja
mi hija necesita hacer una pecera¿como la puede hacer?
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